Esta semana estoy un poco reflexiva, a raíz de un evento ocurrido, un proyecto que no se dió, tuve la oportunidad de examinar lo que pasó, y decidí buscarle la enseñanza.

Creo que toda experiencia nos enseña algo, siempre suma, si así estamos dispuestos a verlo. Esta vez no voy a dar mayores detalles, me reservo eso, quienes me conocen saben a qué me refiero.

Antes me desalentaba muy fácilmente por cómo actuaban las personas que me rodeaban, tendía a tomarme las cosas como algo «personal», cuando muchas veces eran expresiones de opiniones y creencias de los otros. Me desalentaba encontrarme con gente que no veía las cosas desde mi óptica, ni estaba dispuesta siquiera a hacer el intento de ponerse en mi lugar. Con el tiempo, entendí que lo que otro crea y opine es responsabilidad de esa persona, no tiene que ver conmigo.

Y así como cruzarme con gente pesimista, egoísta, egocéntrica me afectaba, también, encontrarme con gente motivada, positiva y altruista influenciaba mi día a día.

De cualquier manera, si tomo cada interacción con las personas que me rodean como una lección,  un mensaje, una señal de algún tipo,  veo que todo encuentro tiene su porqué y su para qué, todo me deja una enseñanza, si estoy dispuesta a verla.

Somos a la vez, maestros y estudiantes.

Como dice Ralph Waldo Emerson: «Todo hombre es superior en mi en algún sentido, y en tal sentido, aprendo de él.»

Tengo la bendición de contar con grandes maestros en mi vida. No hay una sola persona de la cual no aprenda algo (a veces la enseñanza viene por cómo no se debe tratar a otro, lo que no hay que hacer, y sigue siendo una valiosa lección).

Agradezco todas y cada una de las «clases»(algunas espero aprenderlas bien la primera vez, pues realmente no tengo ganas de repetir la lección)

Y vos, qué aprendiste hoy de quienes te rodean?